El recorrido por Chinchero, Maras, Moray y las Salineras ofrece a los visitantes una experiencia que une la grandeza de la naturaleza con la herencia viva de los Andes. En Chinchero se aprecia la fusión de tradición inca y arquitectura colonial, donde las tejedoras locales revelan el arte ancestral del hilado y teñido con pigmentos naturales que asombra por su colorido y detalle. Después se llega a Moray, un conjunto de terrazas circulares que formaron un laboratorio agrícola en el que los antiguos incas experimentaron con distintos microclimas para mejorar sus cultivos, lo que demuestra un conocimiento sorprendente de la tierra y el clima. La ruta continúa hacia el apacible pueblo de Maras, cuyas calles conservan un encanto colonial enmarcado por montañas nevadas y paisajes abiertos de gran belleza. Finalmente, el viaje culmina en las Salineras, un impresionante mosaico de miles de pozas de sal que relucen bajo el sol andino y dejan una imagen inolvidable para quienes buscan una conexión auténtica con la historia y la majestuosidad natural de la región. maravillados con las relucientes Salineras de Maras, miles de pozas de sal que forman un paisaje blanco y dorado único en el mundo. Un recorrido cómodo, educativo y lleno de magia que quedará grabado en la memoria de grandes y pequeños.